COMPARTE:

Claves del Camino

UN MILENIO DE MISTERIOS

Conversaciones con Iker Jiménez

 

Aunque no va en su carácter reconocerlo, sabe que ha hecho y que es historia viva de la televisión en España. Ha logrado presentar el misterio y lo insólito con extraordinaria y envolvente habilidad a millones de personas durante diez temporadas, una eternidad y un enigma genuino en sí mismo en el volátil mundo de la pequeña pantalla. La pasión, el entusiasmo y la fascinación que Iker Jiménez muestra ante las cámaras no son el resultado de una pose…la estrategia es que no hay estrategia. Cuando hay emoción, vemos emoción; cuando hay dudas, vemos dudas; cuando lo extraño se manifiesta, vemos asombro y desconcierto.

En estos días Iker Jiménez y su equipo inician la undécima temporada de Cuarto Milenio, el programa más longevo de Cuatro TV, un espacio vital y en constante transformación que desde el punto de vista técnico es un ejemplo de la excelente calidad que puede tener la televisión sí los presupuestos se gastan realmente en aquello para lo que fueron puestos en las memorias. Durante años en la noche de los domingos se ha visibilizado el universo de lo teóricamente imposible, los desafíos que el misterio y lo inexplicable ponen ante nosotros para sugerirnos que debemos ser algo más humildes a la hora de pretender controlar, medir y explicar el mundo en el que nos movemos. Cuarto Milenio continúa siendo una invitación para despojarnos de los prejuicios y de los argumentos de autoridad que muestran resistencia al avance, a la innovación, a puntos de encuentro entre diferentes formas de conocimiento. Y no lo ha tenido fácil, sin duda, en un medio en el que los “shares” penden sobre la cabeza de los programas constantemente y en el que lo “misterioso” llevaba demasiado tiempo siendo maltratado. Esta semana compartimos confidencias con Iker.

Comencemos por el final de algo, la trayectoria de Milenio 3, un asunto que ronda la cabeza de muchos milenarios que durante décadas han tenido contigo y con tu equipo una cita semanal con el misterio…¿qué ha sucedido? ¿Exclusividad de Mediaset?, ¿cambio de rumbo en Iker Jiménez?…quedó una sensación de orfandad…

Ya tocaba. No soy de los que se aferran a nada. Quiero ser libre. Siempre he sido así. Tú sabes que no es el primer lugar cómodo del que me marcho. Más bien he pasado toda mi vida de nómada. No creo en la seguridad de ningún tipo. Curiosamente Mediaset no me exigió en absoluto dejar la SER. Pero mucha gente no se lo cree. Es una solicitud mía, personal. Paolo Vasile me ha demostrado sentirse muy orgulloso de lo que hacemos y significamos. Y en cierto momento eso inclina la balanza Eso es el click. Quiero explorar en la tele, viajar y hacer otras cosas que no podía con el sistema de llevar a cabo los dos programas. Espero que parte del público disfrute de la nueva aventura.

-En breve estarás con un nuevo formato radiofónico, más personal y hasta “casero”, Universo Iker. ¿En qué consistirá, que nos cuentas…?

Pues eso, casero. Uno mismo y un micrófono. No es irse a otra emisora de la competencia, como pensaban en la SER. Se quedaron muy extrañados porque nadie deja un espacio que lleva catorce temporadas líder. Pero quiero reencontrarme con mi esencia y explorar otras formas de comunicación. Yo no estoy en la vida para hacer siempre lo mismo. El cambio y el riesgo, y más si lo haces desde una posición de privilegio, te mantiene vivo.

-A propósito de este sorpresivo movimiento decía un amigo común, Javier Sierra, en el editorial de la revista Más Allá de agosto, que es tiempo de explorar nuevas plataformas tanto en prensa escrita como el radio… de adaptarnos a cambios…¿qué piensas? ¿Hay cosas caducadas ya?

No. Lo único que te puede caducar es la pasión, el entusiasmo y las ganas. Si no experimentas y manejas tu vida como deseas y no como desean.

-¿Hemos de suponer que tendrás más tiempo para escribir, por ejemplo, o para estar in situ en lugares en los que el misterio parece cobrar forma?

Esa es un poco la clave. Ha sido apasionante combinar radio y televisión esta década. Pero estaba exhausto mentalmente. Quizá solo los profesionales de los medios puedan entender esto. Y eso que siempre he sido muy feliz.  Pero quiero reencontrarme con muchas pequeñas cosas que para mí son muy importantes.

-En nada arranca la undécima temporada de Cuarto Milenio. No haremos la pregunta tópica de sí te había imaginado tantos años en antena…la pregunta es: ¿Tiene Cuarto Milenio fuelle, músculo, energía y espíritu para seguir haciendo temporadas, innovando, sorprendiendo al televidente…y además seguir siendo fiel a sus principios?

Uno de los motivos de mi decisión radiofónica tan comentada tiene que ver con el deseo de potenciar y cuidar el programa televisivo. Es un milagro y me ha aportado mucho en la vida. Me divierto como el primer día. No, me divierto mucho más¡¡. No puedo dejar de darle la importancia que tiene. Su ciclo no ha acabado, ni mucho menos. Y quiero implicarme más profundamente.

-Alguna vez hemos hecho hincapié en este tema, y cada año que pasa es más sangrante, ¿dónde está los premios para CM? Me consta que no los esperas y por tanto que no te importan, pero durante años no ha habido un programa con esa calidad técnica, con tanta inventiva, tan cuidado…lo de los premios parece de pura lógica pero no llegan…¿prejuicios?

De verdad, espero que no nos den un premio nunca. Rompería un poco el “romántico malditismo milenario”. Prefiero ser maldito a domesticado. Y sé cómo se domestica mentalmente. Sobretodo sé cuál es el premio de verdad. Diez años ahí, siendo fieles a unos temas tabú. Y se demuestran que son tabú.  Nadie tiene que decirme lo bueno o lo malo que soy. Yo ya sé lo que hacemos, el esfuerzo que ponemos. El juez que me importa es el público.

-Es evidente que los responsables, Iker y compañía, se gastan el presupuesto en el programa, en conseguir que no queden flecos, que sea lo más impecable posible…

Nos gastamos hasta lo que no tenemos. Mi productor va a enloquecer¡ Pero el entusiasmo por hacer algo en lo que crees te hace no mirar otras cosas. Esa es una de las fórmulas de la pervivencia. No es sólo un trabajo. Es otra cosa.

-¿Cuáles son las claves, o al menos los rasgos distintivos que en tu opinión han convertido a Cuarto Milenio en historia de la televisión en España?

La temática apasionante y eterna pero maltratada; la amplitud de miras que tanto irrita a escépticos y acérrimos de los misterios clásicos; la normalización popular y la categoría de muchos invitados; el entusiasmo común contagiado a un grupo humano; e convencerles, en este caso yo, de que hay una misión,  de que es importante a nivel del inconsciente colectivo lo que está logrando este grupo de locos. Al final CM es un programa de curiosos, buscadores, inconformistas que se dirige a personas que también son así. Eso es maravilloso.

-Es obvio que CM es historia viva…el programa más antiguo de Cuatro TV, en la senda de once temporadas, con la impronta especial de un presentador…y algunos hitos más…

Pero al final, querido amigo, solo vale ese que mencionaba más arriba. El público te ha permitido vivir. No hay otro premio ni reconocimiento. El público te dice que interesas y eres válido. Y eso no hay forma de comprarlo, manejarlo, manipularlo. Esa es la magia de la televisión. Esa es la maravilla. El que está al otro lado…decide.

-Hay temas y personajes que parecen fetiches para Iker Jiménez. Félix Rodríguez de la Fuente, la mística de las cavernas y su arte prehistórico…y el discutido caso de las Caras de Bélmez. ¿Por qué?

Félix es posiblemente el ser más extraordinario del que he tenido noticia. He llorado mucho, de tristeza y de emoción, investigando su vida y obra. Conocer su mensaje profundo me ha hecho crecer.

Las cavernas son el hogar donde creo que regresaré, de alguna manera, en mi último viaje. Porque ellas son como un conducto hacia la luz primigenia.

Bélmez, sinceramente, está a otro nivel. Es un gran caso, maravilloso, mosaico de lo que significa lo extraordinario.

Pero los dos primeros conceptos son básicos en la configuración de mi alma. Son la persona y los lugares que me han hecho ser lo que soy hoy.

-Fuera de estos tres grandes temas, y sabiendo que son cientos de programas y miles de temas abordados…¿hay episodios, experiencias y personajes que hayan desconcertado de forma especial a Iker?

Muchos. Algunos me han aterrorizado. Me han dado pánico. Estoy pensando, estoy en el dilema, de si empezar “Universo Iker” con ellos. No lo tengo claro. Soy toda una contradicción.

-Lo que desconcierta a Iker, logra el mismo efecto con Carmen Porter? ¿Cuáles son los temas bandera de Porter?

Carmen es todo intuición. No sabes hasta qué nivel. No sabes qué “rabia” me da decirle casi siempre que acertó. Que tenía razón en su corazonada. Que eso que ella decía y yo aseguraba que no…era finalmente que sí. Mi mujer es una currante nata. Una apasionada de todo. Y una entusiasta. Es creativa, no pierde un minuto en nada negativo. Eso es algo mágico. El día a día con ella es todo positividad.  Yo cada día la admiro más. Como compañera vital y como madre.

-¿Equilibra Carmen Porter la balanza con un Iker pasional, que siente y expresa el misterio de manera tan elocuente, y muchas veces, comprometida…?

Es menos ansiosa que yo. Menos obsesiva. Yo pierdo los estribos. Me aturullo. No vivo si estoy detrás de una historia. Las historias, los casos, se apoderan de mí. Me consumen. La responsabilidad de que todo vaya bien, a veces también. Ella, por fortuna, sabe centrarme cuando es necesario. Esa doble visión creo que es muy gratificante.

-Menuda España tenemos. Desde Cuarto Milenio estáis descubriendo y dando a conocer cosas absolutamente increíbles del país

Y lo que queda. Una de mis ideas es recorrer España con una serie de drones para descubrir cosas, para sentirlas. Para ver con otros ojos, con otra perspectiva, lugares que “hablan” al cielo con su código. Tenemos un país infinito.

-Es interesante observar la nómina de académicos, científicos y profesionales del más amplio espectro de disciplinas que han pasado, algunos con mucha frecuencia, por CM. ¿Tienen cosas que decir o es, como dicen los críticos extremos, una manera de legitimar y barnizar de ciencia un programa que en principio no es de ciencia?

Los críticos extremos esos…no les llegan a la suela a los científicos que van al programa. Los científicos de renombre y prestigio, los que nada temen, se toman a guasa los rebuznos de los amargados. La gente normal, aporta. Aporta constantemente. Los científicos sanos están deseosos de saber, de buscar, de explicar. Y eso es magnífico.

-¿Les pasa factura a esos invitados en sus ambientes profesionales y académicos el estar en CM?

Yo creo que no. Al revés. Notan mucho el efecto positivo de la gente normal. De esos que antes no se acercaban. Para eso la tele es mágica. Normaliza las cosas. Las baja a la calle, las saca de las esferas de cristal en las que algunos quieren tener saberes inaccesibles.

-Es curioso que esa aptitud de cara descubierta de muchos hombres de ciencia coincida en el tu programa con testigos que prefieren ocultar su rostro. ¿Todavía te estigmatizan como  testigo por contar cosas que en principio no pueden suceder?

Todavía hay miedo. Es comprensible. Nuestra batalla prosigue a ese nivel. Cuando un testigo habla pero está oculto, está teniendo una enorme batalla interior. Quiere que se sepa una verdad…pero teme a su entorno. Cuando eso pasa, lo que hay que hacer es valorar su esfuerzo y,, sobre todo, aplaudir a los que se exponen directamente. Son unos valientes. Y solo avanzaremos con su arrojo. Por eso yo jamás me prestaré a ridiculizar, a minimizar, a echar bromitas televisivas, sobre ningún testigo. Los grandes problemas en televisión los he tenido con algunos que han intentado hacerlo. Y si hacen eso, me tendrán enfrente.

Para esta nueva temporada, ¿qué esperamos? ¿novedades? Veremos a Iker en otros formatos televisivos al margen de CM?

Hay muchas novedades. Pero como todo es un experimento, voy a ir probando cosas. La fauna misteriosa, esa España a vista de dron, la mente colectiva o el psicoanálisis global de la humanidad…hay cosas muy bonitas. De eso se trata. Cuarto Milenio es una caja de la imaginación.

-La expo de Cuarto Milenio clamaba al cielo, después de tantos años, de tanta inversión en recreaciones espectaculares, parecía inevitable que CM generase algo así, único en España y puede que con este volumen y diversidad, en el mundo….¿qué sensaciones te genera?

Ha superado todas nuestras expectativas. Más que hablar de datos, de números, de más de 50.000 visitantes y de todo el impacto, déjame que te deje una imagen: un invidente, tocando las figuras poco a poco, y su esposa, al lado, añadiéndole conceptos para completar la imagen. Y el hombre sonreía como un niño. Como un niño feliz. Eso vale todo. Eso está por encima de todo. Hemos creado algo nuevo. Eso es impagable.

-Danos una alegría y dinos que vendrá a Canarias…

Estoy absolutamente convencido de ello. Porque Canarias nos quiere y nosotros también.

-Cabe esperar que las islas seguirán teniendo su hueco esta temporada.

No lo dudes, camarada. 

José Gregorio González

COMPARTE: