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A pesar de los miles de misterios y temas para el asombro que han sido abordados por Cuarto Milenio en sus quince temporadas, así como a pesar también de las décadas de experiencia periodística inventariando los límites de la realidad convencional, Iker Jiménez jamás imaginó que se convertiría, en el marco de una pandemia, en uno de los personajes más influyentes y mediáticamente monitorizados de nuestro país. En estos meses tanto sus palabras como sus silencios han generado una inagotable cascada de titulares, en ocasiones contradictorios y no pocas veces descontextualizados e instrumentalizados. Ahora, con la tormenta amainando, mantuvimos una serena y reveladora conversación con un periodista que, inagotable al desaliento y con el entusiasmo por bandera, se aventura a explorar los nuevos territorios que se abren en el mundo de la comunicación.

–Empecemos por el final, aunque luego regresemos sobre nuestros pasos. ¿Vuelve Cuarto Milenio a la programación de Cuatro en septiembre?

Sí, regresamos mañana 6 de septiembre tras medio año sin emisión. Medio año en el que he vivido varias vidas.

–¿Quién le iba a decir a Iker Jiménez que se convertiría en uno de los protagonistas mediáticos de la Covid-19? ¿Qué ha pasado? ¿Era algo deseable, buscado…?

Sencillamente mi posición ha sido molesta para casi todo el mundo. No he cambiado mi discurso. Desde muy pronto supe de la gravedad del Sars Cov2 por el contacto con varios médicos y virólogos independientes. No gustó cuando lo decíamos y la corriente era que esto era una gripecita de nada; y no gusta tampoco a los que por diferentes motivos ven un plan oculto o creen que el virus no existe. Yo me he limitado a contar lo que sabía. Y lo sigo haciendo.

–Muchos medios, y cientos de miles de personas, pusieron el foco a diario en todo lo que tanto tu, como Carmen, decían, y en cómo lo decías, en aquello que no decías…¿cómo se sobrelleva esto? ¿midiendo palabras y ajustando el discurso? Tu eres un tipo que trabaja sin guion, que la gente percibe como transparente al decir lo que piensas aunque sea políticamente incorrecto…

Lo único que me importa es que sé que he ayudado a personas. El 11 de febrero y 25 de febrero, mucho antes del estado de alarma, nosotros contamos lo que pasaba. Y lo que iba a pasar. Al detalle. Ese video tuvo 30 millones de visitas en la red. Y a día de hoy recibo mensajes agradecidos de familias o residencias que en su día no nos tomaron por alarmistas y que tomaron sus precauciones. Eso lo hicieron ellos creyendo en nosotros y a contracorriente. Parecía increíble decir esto en televisión. Pero así fue. Lo mantuve cuando todo mi gremio se reía. Luego se cambia el discurso sin disimulo ni rubor porque es lo que toca. Sin mutar la mueca, se dice todo lo contrario a lo de ayer. Y con una sonrisa. Lo complicado es tener un discurso cuando vas al revés de todo el mundo. Y lo haces porque crees que es la verdad. No es un acierto ni una carambola. Es el trabajo de un equipo de once médicos, que algunos ni se conocen entre sí, y que, como yo, tampoco siguen un guión. Esto de ser así siempre da problemas. Pero me quedo con las satisfacciones.

–¿Pusieron en tu boca muchas cosas que no dijiste o que dijiste en contextos que se obviaron y que cambiaban el sentido? ¿Fue una bola de nieve espontánea o algo pensado, planificado?

Es desconcertante. De un signo y otro. De una tendencia y otra. Darse cuenta del problema de la infoxicación diaria da miedo. Si pasa esto conmigo, puede que pase con todo lo demás. Espero que no. Porque significaría que todo es desinformación. Pero claro, yo soy el del misterio. Es una salida fácil para tampoco dar mucha importancia a esta reflexión.

–Para bien o para mal, Iker, todo esto desembocó en que, en apenas unos días, sumaras medio millón de suscritores a tu canal. Es evidente que mucha gente quería la información y los puntos de vista que ofrecías en Milenio Live y en La Estirpe de los Libres.

Imagino que se ha sumado mucha gente al canal de Youtube porque se convirtió en un lugar de información en tiempo real. La Estirpe de los Libres, un nombre un poco grandilocuente que es homenaje a Félix Rodriguez de la Fuente, ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Sobre todo episodios como Laboratorio, Huésped o Patente. Espero que tus lectores puedan verlos. Se muestran cosas que yo no he visto en otros lugares. Incluso a día de hoy. En resumen, me quedé sin programa y a las horas lo hice en mi casa. Y la acogida ha sido inenarrable.

–Tener a cientos de miles, o millones de seguidores, no garantiza que ante ciertas situaciones, uno se sienta bastante sólo. ¿ocurrió algo así?

Sí. Solo pero acompañado de un puñado de gente libre. Pero con afecto de muchas personas. Esa relativa soledad, si va acompañada de convencimiento, es muy llevadera. Si estás convencido de lo que haces y por que lo haces puedes ir solo contra el mundo entero si hace falta.

–Entusiasmo. Los que te conocemos desde hace algún tiempo sabemos que el entusiasmo es como un mantra, un combustible que corre por tus venas, que genera ideas, que te permite remontar de las adversidades…

Es la clave. La única de la que tengo verdadera certeza. Bueno de esa y del amor de los tuyos; y los tuyos no son solo tu familia. El Entusiasmo no deja de ser amor por lo que uno hace. Eso te salva de casi todo.

–Hace apenas unas semanas, te animaste a realizar un curso online sobre el tema, ¿cómo surgió y que balance haces?

Pues pensé dos cosas, que era el momento clave por si le servia a gente que yo veía muy angustiada; y por seguir sondeando unas tecnologías que a mi ya me parecen magia. El resultado superó cualquier expectativa imaginada por mi.

–Lo mismo, Iker, aquellos que se dedican profesionalmente a la motivación, a la orientación, la autoayuda, etc…te pueden ver como un “intruso”.

Peor para ellos. En este confinamiento he realizado el curso online…y he creado La Estirpe de Los Libres, he seguido haciendo música, he lanzado los podcast con sonido binaural Historias Secretas para plataforma Podimo, he inventado MilenioVR…nadie puede con un intruso lleno de Entusiasmo. Y esa ley debería conocerla cualquier profesional “motivador”. Y una segunda muy importante; que a un verdadero entusiasta le da exactamente igual lo que digan de él. Él, sencillamente, sigue a lo suyo.

–Con independencia de cómo vayan las cosas en el corto o medio plazo, ¿el entusiasmo debe estar en la “vacuna”?

Sí. Es buena medicina. La tecnología bien empleada es una máquina para soñar y crear. El tiempo, en vez de en amargarse, es bueno emplearlo en crear.

–Es posible que jamás haya existido tanta expectación sobre la nueva temporada de Cuarto Milenio como ahora, 15 años después. Los focos volverán a estar sobre ti. Probablemente esto no le sucederá a ninguno de los programas que, como CM, tuvieron que finalizar temporada antes de tiempo.

Yo estoy muy tranquilo. Voy a hacer lo que siempre he hecho. No me tiembla el pulso. Solo voy a seguir haciendo el periodismo en el que creo. Cuando uno hace lo que cree nada puede ir mal.

–¿Qué nos puedes avanzar?

Bueno, entre otras cosas…he conocido al Sars Cov2

–Ya sabes que si no lo pregunto, reviento, ¿Canarias seguirá teniendo su cuota?

Eso ni se pregunta, “mostro”, porque ya sabes la respuesta.

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