IAN RUBENSTEIN: LA INCREIBLE HISTORIA DE UN MEDIUM ESCÉPTICO
Mediumnidad en la consulta de un médico de familia
Nada en su afable aspecto o en su metódico comportamiento harían sospechar que además de médico, Ian Rubenstein es un médium. Un médium un tanto inusual, dado que aun se cuestiona algunas de las sorprendentes experiencias que acumula, pero médium a fin de cuentas. Los espíritus le hablan, ocasionalmente puede verlos, le tocan, le cuentan cosas verificables…y aun así, su formación racional y la realidad cotidiana a la que se enfrenta, mantienen vivos los rescoldos de la duda. Hoy compartimos su historia.
Pasa consulta diaria como médico de familia en el Eagle Cirugía House, un centro hospitalario ubicado en Enfield, al norte de Londres. Allí, junto a otros seis médicos y tres enfermeras, el Dr. Ian atiende a una media de 40 a 50 pacientes diarios, en su mayor parte al límite de la pobreza e inmigrantes, sacando tiempo para realizar visitas a domicilio, diseñar software médicos y llevar una vida relativamente normal. En 2012 publicó “Spirit Consulting: A Doctor´s Experience with Practical Mediumship” libro en el que narra sus experiencias. Su historia nos llamó la atención y por ella le preguntamos.
– ¿Qué sucedió en su vida en el año 2003 para dejar de ser aquel médico y convertirse en el médico actual?
En julio de 2003 uno de mis pacientes inesperadamente me dijo que estaba viendo a mi abuelo fallecido, y me dio un mensaje muy fiable sobre una situación familiar problemática. También me exhortaba a que me abriera a estos fenómenos, que me dejara llevar. Aquello fue confuso, pero comencé a experimentar una extraña secuencia de acontecimientos. Un sueño extraño con un personaje que me dice que puedo ver el aura; escuchar una voz que me advertía de un robo que finalmente se produce y que me conduce a un agente de la policía local que termina haciéndome una lectura espiritual en la comisaría… Se acumularon las experiencias y un primo mío me explicó que “ellos” querían trabajar conmigo. Con “ellos” se refería a entes espirituales.
-¿Y que hizo?
Bueno, busqué algo de ayuda. Dave Godfrey, un profesor de biología que abandonó su carrera para dedicarse a la sanción espiritual, me dijo que estaba teniendo una experiencia kundalini, que debía abrirme a la comunicación con los espíritus y que era recomendable que para ello entrase en contacto con algún grupo de desarrollo psíquico. La idea no me pareció precisamente buena, ya que a pesar de mi origen judío, en mi familia había habido miembros fuertemente ateos del Partido Comunista Británico. A mi juicio, cualquier cosa espiritual no sólo era errónea, sino también una herramienta para reprimir la clase trabajadora. Al final entré en contacto con varios grupos y médiums.
– ¿Cómo se manifiesta con mayor frecuenta su mediumnidad?
Los mejores médiums son capaces de mantener conversaciones con sus supuestos comunicadores. Desafortunadamente, rara vez me ocurre a mí. En mi caso la comunicación ocurre con más frecuencia cuando estoy con un paciente y es totalmente espontánea. Por lo general comienza con una imagen mental sorprendentemente clara, que reconozco como algo que tengo que transmitir a mi paciente. Estas imágenes son muy persistentes. A menos que me esfuerce en quitármelas de la cabeza por lo general no van a desaparecer hasta que le he haya dicho al paciente lo que estoy viendo. Si el destinatario quiere “tomar” lo que le he dado, comienzo a recibir una serie de imágenes nuevas. Mayoritariamente recibo imágenes clarividentes. A veces son evidentes. Otras veces parecen ser un símbolo de situaciones que el paciente podría estar experimentando. Y a veces estas imágenes aparecen envueltas como en un paquete de información que se “cae” en mi mente.
-¿Tiene usted, o ha logrado identificar, a espíritus guías, que con mayor frecuencia conectan con usted?
El guía que me ayuda con mi clarividencia se llama “Kosa”. Kosa se presenta como un hombre africano joven, alto y delgado, miembro del pueblo xhosa de Sudáfrica, un grupo étnico pequeño pero muy influyente al que han pertenecido prominentes figuras como Nelson Mandela, el arzobispo Desmond Tutu y Steve Biko. Ellos estuvieron involucrados en la lucha contra el régimen de apartheid en Sudáfrica.
-¿Recuerda los primeros momentos en los que comenzó a ver más allá en su consultas?
Tenía una mente racional y acostumbrada a parámetros científicos y ahora tenía que aprender a comunicarse con una parte más sutil e intuitiva de mi mente, en un esfuerzo por llegar a alguna forma de existencia espiritual. Al principio estaba muy incómodo y estaba ansioso por explicar que mis mensajes eran sólo “ideas raras” que estaba teniendo. Pero los pacientes estaban convencidos de que estaba en contacto con sus seres queridos fallecidos
-Después de 10 años ¿considera sus “habilidades” algo útil?
Con el paso de los años me he ido sintiendo más cómodo con ellas y he logrado incorporarlas a mi trabajo médico. Las he encontrado particularmente útiles cuando se trata de aconsejar en el proceso del duelo y cuando se dan cambios en la vida los pacientes.
-¿Cuáles fue la reacción de otros colegas de profesión y de la comunidad científica en general cuando comenzó a hablar abiertamente del tema, publicando incluso un libro?
En general me sorprendió la aceptación recibida de mis colegas y pacientes, y el no haber sufrido la censura que temía. Sin embargo, dado que mis experiencias son totalmente anecdóticas, no espero de forma especial ningún interés científico por ellas.
-En estos años de experiencias, ¿Qué conclusión saca sobre la realidad, la conciencia y la supervivencia tras la muerte? ¿Considera que ha sido y es una experiencia positiva en su vida?
Mi fondo científico y médico me hace ver que hay enormes dificultades para aceptar estas experiencias, y en principio, habría gran cantidad de dificultades para su integración en una visión del mundo viable. Entiendo que si estas experiencias son hechos válidos, reales, entonces la visión materialista del mundo que prima actualmente en la sociedad occidental es defectuosa. Siento que puede ser necesario revisar nuestras definiciones del espacio, del tiempo y de la identidad, y que la conciencia, lejos de ser un “epifenómeno”, bien podría ser primaria. Pero todo eso es especulativo. Realmente, sobre mis experiencias, puedo decir que han sido el punto de partida de un maravilloso viaje de exploración que me ha llevado a cuestionar casi todo lo que daba por sentado.
José Gregorio González
